Bebé Peluches

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Muchos bebés tienen un peluche del que no se puede separar. Para la mamá y el papá es un juguete que sobre todo atrae baba, lágrimas y restos de comida, pero para el bebé, este peluche no tiene precio. ¿Cómo tratar con el peluche favorito?

¿Es útil que mi bebé tenga consigo un peluche en la cama?

Sí. Si tu bebé tiene un peluche favorito, no se trata de un juguete más sino un amiguito que le acompaña a todos lados. Un peluche también le ayuda a tu bebé a pasar por momentos difíciles, por ejemplo, si no se encuentra bien.

Cuando tu bebé está enfermo, un peluche puede ayudarle. Incluso puede ser el conejillo de indias para situaciones nuevas y emocionantes. Primero deja que el peluche pase por la situación y luego ya se atreve a hacerlo por su cuenta. Una especie de amigo que le ayuda a superar el miedo al fracaso.

¿Cuándo le puedo dar un peluche a mi bebé?

Puedes dejar un peluche en la cuna de tu bebé ya desde el nacimiento. Tu bebé no le cogerá cariño de inmediato, pues esto por lo general suele ocurrir aproximadamente a partir de los 7 meses. Asegúrate de tener algunos peluches iguales de más por si lo pierde.

Al crecer, tu bebé o tu peque se distanciará de su peluche favorito sin darse cuenta. Esto puede tardar un poco menos o un poco más, dependiendo de cada uno, pues para algunos niños no es tan fácil prescindir de su animal de peluche.

A menudo, el distanciamiento se produce cuando la criatura empieza a ir a la escuela. No puede llevarse el peluche a clase todos los días, por lo que la distancia aumenta. Y un día de repente el peluche ya no es su peluche favorito, sino un juguete más.

¿Desde cuándo puede el bebé tener el peluche en la cama?

Tener un peluche es una cosa, pero llevárselo a la cama es otra. Tu peque se mueve mucho y requiere mucha comodidad, calor y amor. Pero la seguridad es lo primero. Así que asegúrate de que tu niño o niña tiene un peluche seguro. Si es así, no hay ninguna edad mínima para poder tener un peluche en la cama.

Un peluche seguro:

  • Es un peluche sin partes sueltas;

  • Que no queda a la vista cuando se lo quieres quitar, pues has visto que el bebé ya no puede dormir sin su animalito de peluche;

  • Que no cubre la cabeza ni la cara de tu bebé (lo mismo que con las toallitas o las mantas que se han ensuciado con la saliva).

  • Que deja pasar el aire y, por lo tanto, no queda lleno ni empapado con baba.

¿Cuándo juega mi bebé con el peluche?

Muchos papás y mamás no tienen idea de por qué su bebé ha elegido un determinado peluche. Tu bebé decide por sí mismo cuál será su peluche favorito. De hecho, puede suceder que vuestro primer bebé no pueda pasar sin él, pero que el segundo ni lo vea.

Hay mucha diferencia de unos niños a otros en este sentido: unos se encariñan mucho con el peluche, otros para nada. Cuando los niños son un poco mayores también pueden apegarse a sus botas de agua, a un coche de juguete, a un chupete o a una muñeca. Los niños, y por lo tanto también los bebés, cogen cariño a las cosas.

¿Con qué frecuencia tengo que lavar el peluche de bebé?

El peluche favorito de tu peque precisa de lavados frecuentes. Es probable que a tu bebé no le parezca muy necesario porque la tela va adquiriendo un olor que le resulta familiar y al que le ha cogido cariño. Una lástima, porque hay mucha suciedad de la que se tiene que librar el peluche.

Los peluches y los juguetes para bebé son el caldo de cultivo favorito para los ácaros del polvo doméstico y las bacterias. Para evitarlo, lava el peluche favorito de tu bebé a 60 grados una vez cada 6 semanas. Este programa de lavado mata todas las bacterias. Si lo lavas en agua más fría, el peluche parecerá fresco, pero no estará libre de ácaros y bacterias.

Otras maneras de limpiar el peluche favorito

También puedes limpiar el peluche sin lavadora. Si el peluche de tu bebé no se puede lavar a 60 grados, siempre lo puedes poner en el congelador. Ponlo en una bolsa de plástico y déjalo en el congelador durante 24 horas. Una vez hecho eso, todo lo que tienes que hacer es sacudirlo.

Si tu criatura vigila de cerca a su peluche favorito, lávalo cuando tu bebé esté durmiendo o cuando no lo eche de menos. También puedes bañar al peluche junto con tu bebé.